Qué es un Concurso de Acreedores y Cómo Pedirlo Paso a Paso en España
DERECHO MERCANTIL
Alex León
12/7/20254 min read


Qué significa un concurso de acreedores
Un concurso de acreedores es un procedimiento legal mediante el cual personas físicas, autónomos o empresas insolventes buscan reorganizar sus deudas o liquidar sus bienes de manera ordenada. La finalidad principal es garantizar que los acreedores reciban lo que les corresponde de manera justa y proporcional, y que el deudor tenga la oportunidad de regularizar su situación dentro del marco legal.
Es importante entender que el concurso no siempre implica el cierre de la empresa o la ruina total del deudor. En muchos casos, permite reestructurar la deuda, negociar plazos de pago y conservar la actividad económica, evitando consecuencias más graves como embargos masivos o procedimientos judiciales desordenados.
Tipos de concurso de acreedores
En España se distinguen dos tipos principales de concurso de acreedores:
Concurso voluntario
Lo solicita el propio deudor cuando reconoce que no puede cumplir con sus obligaciones de pago. Este tipo de concurso permite al deudor:Presentar un inventario completo de bienes y deudas.
Proponer un convenio de pagos a los acreedores.
Intentar salvar la actividad económica si es viable.
Ejemplo: una empresa que atraviesa problemas de liquidez y no puede pagar a proveedores ni impuestos, puede presentar concurso voluntario para negociar pagos y continuar operando.
Concurso necesario
Lo solicitan uno o varios acreedores cuando el deudor no paga sus obligaciones y se niega a regularizar su situación. En este caso:El juez inicia el procedimiento para proteger los derechos de los acreedores.
Se designan administradores concursales para supervisar el patrimonio.
Se analiza si es posible salvar la empresa o si procede su liquidación.
Ejemplo: un proveedor que no recibe pagos puede instar concurso necesario para recuperar su crédito y garantizar que otros acreedores también sean atendidos.
Cuándo se debe solicitar un concurso de acreedores
El concurso se debe solicitar cuando el deudor está en situación de insolvencia, es decir, cuando no puede pagar sus deudas a su vencimiento. Algunos indicadores son:
Incumplimiento continuado de pagos a proveedores, trabajadores o Hacienda.
Falta de liquidez para afrontar pagos inmediatos.
Deudas superiores al patrimonio disponible.
Alertas de bancos sobre sobreendeudamiento o impagos.
Importante: solicitar el concurso a tiempo es fundamental. Retrasar esta decisión puede derivar en responsabilidad personal del deudor y sanciones legales, además de empeorar la relación con acreedores y bancos.
Objetivos del concurso de acreedores
El concurso persigue varias metas:
Garantizar equidad entre los acreedores y organizar el pago de manera ordenada.
Evitar ejecuciones desordenadas o embargos caóticos.
Posibilitar la continuidad de la actividad económica, en caso de empresas.
Proteger al deudor de responsabilidades personales, siempre que actúe de buena fe.
Facilitar la reestructuración de deudas, a través de convenios, quitas o fraccionamientos.
Fases del concurso de acreedores
El proceso concursal tiene varias etapas que conviene conocer para actuar correctamente:
1. Solicitud y declaración judicial
El deudor o acreedor presenta la solicitud ante el juez competente. Es necesario acreditar la insolvencia y aportar documentación completa de bienes, deudas y situación financiera. Tras analizar el caso, el juez declara el concurso.
2. Nombramiento de administradores concursales
El juez designa profesionales que supervisarán el proceso. Los administradores:
Gestionan los bienes del deudor.
Evalúan la viabilidad de la empresa o patrimonio.
Garantizan que los acreedores reciban pagos de manera ordenada.
3. Identificación y clasificación de créditos
Se hace un inventario de todas las deudas y se clasifican según prioridad:
Créditos privilegiados: salarios, Hacienda, seguridad social.
Créditos ordinarios: proveedores y acreedores sin privilegio legal.
Créditos subordinados: deudas con menor prioridad o contingentes.
4. Propuesta de convenio o liquidación
Si es posible, se negocia un convenio que puede incluir:
Quitas: reducción de la deuda total.
Plazos de pago: aplazamiento de la obligación de pagar.
Si no hay acuerdo, se procede a la liquidación del patrimonio, vendiendo bienes y distribuyendo el dinero según la prioridad legal de los acreedores.
5. Finalización del concurso
Una vez cumplidos los pagos posibles o ejecutado el convenio, el juez cierra el procedimiento. En ciertos casos, el deudor puede obtener exoneración de deudas, siempre que haya actuado de buena fe.
Ejemplos prácticos
Empresa en dificultades: Una pyme con deudas a proveedores y Hacienda solicita concurso voluntario, propone un convenio con quitas y logra mantener su actividad mientras paga en plazos.
Autónomo insolvente: Un profesional autónomo con impagos acumulados presenta concurso voluntario, liquida algunos bienes y llega a un acuerdo para pagar el resto en cuotas.
Concurso necesario: Un proveedor inicia concurso necesario contra una empresa que no paga, para que el juez organice el pago de todos los acreedores.
Errores frecuentes al solicitar concurso de acreedores
Retrasar la solicitud hasta que la situación es crítica.
No presentar la documentación completa, lo que puede retrasar el proceso.
Ocultar bienes o ingresos, que puede ser considerado delito.
Intentar negociar sin asesoramiento profesional, aumentando riesgos de impago o conflicto con acreedores.
Beneficios de actuar a tiempo
Evitar responsabilidad personal por deudas acumuladas.
Mantener cierta credibilidad ante bancos y proveedores.
Posibilidad de reorganizar la empresa y continuar operando.
Reducir el riesgo de conflictos judiciales desordenados.
El concurso de acreedores es una herramienta legal fundamental en situaciones de insolvencia. Permite proteger derechos, organizar pagos y reestructurar deudas, evitando consecuencias graves. Actuar a tiempo, con buena fe y asesoramiento profesional, puede marcar la diferencia entre perderlo todo o recuperar estabilidad económica. Conocer cada fase, los requisitos y los beneficios es esencial para autónomos, empresarios y particulares que enfrentan dificultades financieras.